Myriam Bregman: “Vamos a pelear por bancas que representen a los trabajadores y trabajadoras”

El día después de las elecciones primarias (PASO) la candidata a Diputada por CABA del Frente de Izquierda de los Trabajadores, Myriam Bregman, charló en exclusiva con Revista Sudestada sobre el resultado de las urnas.

-¿Qué lectura hacés Myriam de la jornada de ayer después de los resultados que obtuvo el FIT en todo el país? ¿Estamos en condiciones de hacer un primer balance de este termómetro que dejó la jornada electoral?
Durante toda la campaña lo veníamos planteando, que había un enorme descontento con el gobierno, que estaba muy fresca la experiencia macrista y que la izquierda tenía un lugar, un reconocimiento en la calle. Hubo una gran operación del sistema mediático donde se nos ignoraba completamente. No teníamos ningún tipo de presencia ni siquiera en las encuestas. Nos costó muchísimo. Fue una elección muy atípica y dura para nosotros porque los lugares donde siempre vamos como hospitales, universidades o lugares de trabajo estaban restringidos por la pandemia. A pesar de eso, nos empezaron a llegar decenas y decenas de apoyos de personalidades del deporte, del arte, periodistas e intelectuales. Todo eso no estaba reflejado en las encuestas. Ni nos ponían. 

Ayer no solo se vio una derechización del marco político, sino también se ve que hay una polarización. Si sumás los porcentajes a nivel nacional, cosa que hizo hoy Clarín inmediatamente, la izquierda es la tercera fuerza.

-Capital tuvo algunas particularidades y mucho de qué hablar. Vidal refugiada bajo el ala de Larreta después de su fracaso en la provincia, un Milei con un discurso de derecha aterrante… En ese sentido, ¿Cómo entra la pelea del FIT y tu candidatura como diputada?

A mí también me preocupan por eso nosotras los hemos enfrentado. Milei expresa valores machistas, misóginos, de superioridad moral, estética; dice absolutamente cualquier cosa. Todos los valores contrarios a los que destacamos desde la izquierda. Mientras nosotros hablamos de solidaridad, él habla de meritocracia. Tiene una serie de metáforas darwinianas, como su discurso del león de la selva, que la verdad que preocupan. Hay un mito que se ha querido instalar de que la rebeldía era de derecha, que se llevaba a los jóvenes. Esto se demostró falso ya que desde la izquierda hicimos la mejor elección de la historia en las PASO.Evidentemente nosotros crecimos.Se instalan esos lugares comunes siempre muy convenientes para las fuerzas mayoritarias. 

-Venimos de un oficialismo en crisis, con dos años de pandemia encima. ¿Cuál fue la impresión que tuviste al escuchar el discurso de Alberto?

-Alberto Fernández se ha mostrado muy débil ante los poderosos, muy blandito. Eso no tiene retórica discursiva posible. En este país para que los trabajadores reciban algo, hay que afectar los intereses de los poderosos. Siempre que voy a un debate dicen “la Argentina está quebrada”. La Argentina no está quebrada. Hay sectores que están quebrados. Pensemos en el agronegocio, o en los bancos que ganaron como nunca. Durante la pandemia algunos ganaron con récords históricos. Lo que tiene que cambiar son los hechos, no el discurso. El condicionamiento que significa el Fondo Monetario no es algo menor. Este gobierno aceptó la herencia macrista de la deuda y la gestionaron. Ahora, si desalojan Guernica, bajan el salario y otro montón de medidas es lógico que no puede pretender que los voten. Eso se expresó en las urnas.

-Primero remarcar el gran resultado en Jujuy del FIT ¿Creés que ese piso puede crecer y verse reflejado en noviembre en otros distritos y provincias?

-Los días previos era increíble lo que sentíamos en la calle, el apoyo. Las encuestas no demostraban eso. Nos pasó en Jujuy, hay mesas de 30 puntos y que ganamos. En Jujuy nuestra fuerza sufrió una persecución enorme, pero nosotros estamos orgullosos de nuestro candidato, que es recolector de residuos. Nuestra izquierda representa a los trabajadores, no es un socialismo que se queda opinando, sino que verdaderamente construimos todos los días. La elección fue un premio a la izquierda que se une. 

En cuanto a esto que planteás de la izquierda que se une ¿Hay posibilidades de ampliar este frente de izquierda con otros sectores?

-Creo que los resultados que obtuvimos nos muestra que muchos votantes de esos sectores nos acompañaron a nosotros, por más de que muchos de sus dirigentes dijeron “no se les ocurra votar al frente de izquierda”. Yo creo que muchos de ellos nos eligieron porque saben de nuestro compromiso y valores. Aunque no coincidan con todas nuestras ideas, si lo hacen con las básicas, y saben que para lo que tienen que enfrentarse Argentina y el pueblo trabajador, la izquierda es una garantía de que hay una voz que se va a plantar en el congreso ante la derechización del conjunto del arco político. 

De acá a noviembre vamos a pelear por conquistar bancas que realmente representan la pelea de los trabajadores y las trabajadoras, de la juventud, de la mujer. Es algo que no van a hacer los burócratas de la CGT, que no lo van a hacer los candidatos veletas que hoy están con unos y mañana con otros, ni ninguna de las dos grandes coaliciones. Con mucha militancia de base, recuperando la calle para nosotras, creemos que podemos conquistar esa banca como punto de apoyo para todas las peleas que daremos junto a los sectores que están convencidos de que el camino es de lucha y organización, y  no masticando bronca en la casa.