Posterior a Cris Miró, Flor de la V dejó en la televisión argentina un sello imborrable: la confirmación de que una travesti podía ser mucho más que un personaje para la ridiculización.
Posterior a Cris Miró, Flor de la V dejó en la televisión argentina un sello imborrable: la confirmación de que una travesti podía ser mucho más que un personaje para la ridiculización.