Somos Río, y también somos Memoria

El sábado 25 de marzo, en el cierre de el ciclo de teatro Memoria Cautiva, realizado en el Teatro Flotante sobre el río Paraná, se presentó Somos Río. La obra está integrada por el grupo de teatro La 23, dirigida por Nancy Coronel, la “máquina de hacer”, como la conocen los vecinos y vecinas del Barrio Juan XXIII.

Por Natalia Schejter

La génesis de lo que hoy es una Asociación Civil con aulas, biblioteca y Salón de Usos Múltiples surge durante la crisis del 2001, cuando Olga Flores, mamá de Nancy, y un grupo de vecinas ocuparon un galpón para establecer un comedor de emergencia. Allí, los ojos amorosos de Nancy y de otras docentes detectaron que el hambre de los pibes iba más allá de la panza, y fue entonces que se incorporaron los juegos teatrales, la música y la danza como forma de alimentar también el alma. “Los chicos se deprimen, están frustrados, se sienten mal, y es allí donde tenemos que accionar”, sostuvo Nancy, que fue la confluencia de esta realidad junto a otro factor social que determinó la génesis de La 23.
Nancy había notado que un grupo de mujeres trans y travestis eran sistemáticamente discriminadas en la comparsa barrial, la Ñande Mbareté. Al incorporarlas a los juegos teatrales, muchas de ellas encontraron el espacio para contar sus propias historias, y así nació la primera obra de teatro, donde el amor y el humor dieron lugar una pieza que habla de una tía trans maternando a los hijos de quienes la discriminaron. Fue un éxito rotundo, y la llave para romper prejuicios y estereotipos.

Con potencia y humildad, Nancy recuerda cuánto aprendió sobre estas realidades de la mano de Patricia Ramírez, activista trans atropellada y abandonada en la calle el 24 de diciembre del 2022, y cuya muerte sigue siendo bandera de reclamo por justicia del colectivo LGBTIQ+
Somos Río es la historia de una familia costera que lleva más de 30 años viviendo en el barrio, que sufre un intento de desalojo y el apriete de los poderosos que quieren apoderarse de su lugar en el mundo. Se trata de una realidad que Nancy ha visto de cerca con el grupo de “cuidadores de la casa común”, vecinos y vecinas que forman parte de La 23 y que más de una vez se han enfrentado a empresas que, en el afán de ampliar sus posesiones, han llegado hasta a cortar calles públicas e impedir el paso de las ambulancias. Estos “cuidadores” son quienes llevaron a cabo el programa del Vaticano de Turismo Comunitario, consistente en recorrer su territorio encontrando puntos de interés turístico, paisajes maravillosos e historias de injusticia y desigualdad, como el caso de Kevin Candia, joven asesinado en el Penal N°1 de Corrientes y cuya madre, Erika, todavía continúa luchando por justicia.
Somos Río es el acabado ejemplo del teatro como herramienta potente donde los vecinos ponen el cuerpo en escena para contarle y cantarle a la sociedad la realidad del barrio a través de la música, el humor y la actuación, un modo de gritar las historias que los medios hegemónicos se empeñan en ocultar.