Scioli: “A Milei le van a tener que dar el Premio Nobel”

Por Editorial Sudestada

Para tapar la realidad, hay que mentir. Para que los datos no sean datos, existe el “relato”. Para distraer y que la información real no domine la agenda mediática se necesita que alguien diga semejante estupidez y lo que le llegue a la gente es: Milei-Nobel. Justo cuando la Ley de Bases no es lo que el gobierno nacional espera, y el Pacto de Mayo en realidad se podría transformar en un “Acto” de Mayo.

Y ahí llega él, Pichichi, el “camaleón funcional” de los poderes, el que siempre cae parado, se raspa, pero nunca se va. El que “funciona”, siempre y cuando la transa y la negociación lo acompañe y lo ampare. El de los múltiples “principios”, el del abrazo con Menem y la mano con Macri, el peronista de la Bonaerense, el gatillo fácil, la edad de imputabilidad, la represión en “tomas”, pero también el que se subía al caballo de  “la inclusión, la igualdad, y la ley de medios”. El mismo que se subió y cayó del mismo bondi una y otra vez, siempre con la sonrisa en la cara, el bolsillo dispuesto, y la funcionalidad de los que “funcionan” para el neoliberalismo ya demasiado conocido. 

Ahora, para endulzar los oídos al presidente, larga esta frase frente al hambre y la miseria planificada. Con la misma lógica de que el “argumento” sea una hoja de excel, un balance que ni ellos creen, un déficit que se logra -pongamosle que los números son reales- a costa del vaciamiento de todo lo público, de la desfinanciación, del hambre en lo barrios, de la condena y sentencia a las pymes y a todos los trabajadores, con miles y miles de despedidos, con salarios primero devaluados y luego congelados, con servicios de necesidad básica con aumentos de más del 300%, con medicamentos que no entregan, con bolsones de alimentos que se pudren, con la represión a cualquiera que reclame, con las Universidades nacionales a punto de cerrar,  y con el dolor que conlleva abrir la heladera en estos tiempos. 

Frente a todo esto, y mucho más, Scioli habla de Premio Nobel. ¿Se puede agregar algo?