La Renga reventó Colonia

El sábado 27 de septiembre va a quedar tatuado en la memoria de Colonia. La Renga desembarcó por primera vez en el Estadio Suppici y armó un verdadero banquete de rock and roll que juntó a más de 20.000 personas, venidas de todos lados para ser parte de la fiesta.

Por Agustina Rúa

Desde temprano la ciudad se transformó: micros, autos, motos y hasta ferrys llenos de hinchas rengueros que coparon cada rincón. La previa fue una celebración: banderas, bombos, amigos reencontrándose y ese clima único que solo se vive en un recital de la banda de Mataderos.
A las nueve de la noche se apagaron las luces y empezó la descarga: “Chizzo”, “Tete”, “Tanque” y Manu metieron casi tres horas de puro fuego. No faltaron clásicos como “La balada del diablo y la muerte”, “Panic Show”, “El final es en donde partí” y ese grito colectivo que estalló con “La razón que te demora”. Cada tema fue pogo, saltos y un coro gigante que no se calló nunca.

La banda uruguaya E.N.T.E. abrió la jornada y prendió la mecha para que después la Renga arrasara con todo.
El impacto se sintió en toda Colonia: bares, hoteles y almacenes trabajaron a full. Pero más allá de lo económico, lo que quedó fue la mística: Colonia se convirtió, por una noche, en el templo del rock.
No hubo bardo, solo música, pasión y una multitud que se fue con el corazón explotado de felicidad. Fue mucho más que un recital: fue un banquete popular que ya quedó en la historia renguera.