Por Editorial Sudestada
La defensa a la corrupción nacional es absurda, con el triángulo de coimas entre Karina, Lule y Martín Menem, solo si hablamos de Andis, pero las cometas vienen de larga data, y el gobierno salpicado de todos lados, con los funcionarios que los mandan a esconderse, con Adorni “detrás de la puerta” y su hermano que lo callaron de un plumazo, con el silencio de Milei y su hermana, con Francos al “sobre”, con el sobrino de Carlos Saúl -Martín- que rompió el silencio y luego le canceló a Majul, porque se ve que la “defensa” fue peor que el silencio.
Y hablan de “operaciones”, cuando las prueban desbordan, como sucedió con el caso $LIBRA tapado enseguidita por estos mismos operadores. Y Fantino… con esto que habla por sí mismo, y con otros tantos como Jony Viale, Feinmann, Clarín y La Nación que dan un pasito -solo un pasito- al costado para no quedar embarrados en lo que se sabe, se comprueba y expone: la corrupción de la falsa “libertad” arraigada del clan Menem y de la familia Milei.
A poco de las elecciones, con un candidato más manchado que otro, con prontuarios y denuncias, con Espert repudiado, con Karina que habla de “voten para que no nos roben más” -la impunidad logra estas cosas-, con el presidente que va a Junín y pretende confundir todo otra vez, pero sin Caputo, con la interna que arde puertas adentro, con varias palizas en el Congreso, con gobernadores que miran de reojo y cuando sea el momento “saltan del barco”, con Macri que no dice ni una sola palabra, con Bullrich y Pettovello, Sturzenegger, y los senadores de la ley Bases, empapados y con el terror de “otros audios” que pueden llegar, y con la muestra de la corrupción estatal y el “equilibrio” de las coimas.
Esto es un reflejo de quienes nos gobiernan, con el 3% por acá, los 800 mil dólares por otro lado, con los sobres de 200 lucas verdes que se rajaban, con Kueider y Paraguay, con las valijas sin control de aduana, y con la mafia puertas adentro que ahora se desnuda, y que muestra que Karina, la que nadie votó, es uno de los eslabones de la corrupción millonaria de los mismos de siempre.
