Persecución a docentes

La realidad salarial de lxs docentxs en todo el país es crítica. Con una inflación que no para de subir y un contexto de crisis económica que no da respiro, el sueldo de los docentes ha quedado por el suelo. Este es uno de los motivos por los cuales se han movilizado en diferentes provincias en las últimas semanas, tomando medidas de fuerza como paros, cortes y manifestaciones. Las manifestaciones masivas en La Rioja, el corte del puente en Neuquén hace unos días y la realidad de lxs trabajadorxs de la educación en Mendoza son algunos ejemplos de lo que está ocurriendo: se está persiguiendo, hostigando y amenazando a profesorxs y maestrxs. En diálogo con Sudestada, algunxs docentxs dieron su testimonio sobre una temática que preocupa y está totalmente invisibilizada por los medios.

Por Editorial Sudestada

Trabajadorxs de escuelas públicas y privadas de Mendoza, nucleadas en Sute y Sadop, manifestaron: “Nos encontramos transitando el segundo día de un paro de 72 hs propuesto por el sindicato de docentes de educación pública de gestión estatal y privada. La lucha es de siempre, pero hoy nos encontramos peleando nuevamente por nuestro salario, ya que, nosotros en la provincia no cumplimos con el mínimo nacional que se define en paritarias nacionales, el gobierno de Mendoza hizo una propuesta  paupérrima, que consistía en ponerse al día con la paritaria nacional, no otorgando ningún aumento, siendo también que en el 2020 no percibimos ningún aumento en todo el año, y hoy  con la inflación y como está la canasta básica obviamente que llegar al mínimo nacional es insuficiente. El sindicato no aceptó las propuestas que se hicieron en las dos reuniones paritarias que hubieron, entonces el gobierno da el aumento por decreto, como siempre. Por lo tanto lo que se propone desde los gremios es nuevamente volver al paro. La propuesta fue realizar la medida de fuerza por 72 hs y realizando diferentes acciones en la calle: panfleteadas, olla popular, encuentros en las diferentes plazas departamentales, caravanazos y movilización”.
Lxs docentxs siempre puestos en el ojo de la tormenta, acusándolxs de abandonar las aulas y persiguiendo a quienes hacen paro. “Necesitamos ayuda los docentes de Mendoza. Nos encontramos transitando un paro de 72 horas y el gobierno y la policía nos persigue. Basta de persecución y amedrentamiento”, nos escribió una docente adjuntando una foto de la policía dentro de la escuela exigiendo la lista de los trabajadores que adhirieron al paro en la escuela Güemes de Luján. “Estos días de paro los docentes y directivos hemos sido perseguidos, el gobierno de la provincia de Mendoza ha enviado a la policía a revisar planillas de firmas para constatar quiénes han asistido y quiénes no. Además la policía se ha encontrado intimidando a los trabajadores de la educación que se han encontrado en algunas manifestaciones, agregaron. Además se lo escuchó al Director General de Escuelas de la provincia José Thomas el día viernes en una conferencia de prensa diciendo que “evidentemente los docentes tienen un profundo desprecio a la presencialidad como durante toda la pandemia”.

Un caso similar ocurrió en La Rioja hace algunas semanas donde las autoridades obligaron a lxs docentxs a volver al aula con amenazas y la policía en la calle persiguiéndolxs. Una docente, la cual no quiere dar su nombre por miedo a que le hagan un sumario, dialogó con nosotrxs y dijo: “la Provincia de La Rioja estuvo más de dos meses y medio de paro, sin asistencia a los establecimientos educativos. Hicimos varias marchas masivas. Tratamos muchísimas veces de que el gobernador nos atienda. Él nunca nos quiso atender. En las noticias salió a decir que si los maestros de la provincia no les gustaba ese trabajo que se busquen otros trabajos, que si no nos alcanzaba que busquemos otro trabajo.

El ministro y el gobernador salieron a decir que si no íbamos a trabajar nos iban a sumariar. A muchos les descontaron de su recibo de sueldo sumas importantes por adherir al paro. Nos persiguieron hasta que lograron lo que ellos querían, que era que volviéramos a dar clases y abandonemos la lucha. Una vez que volvimos al aula, decidimos volver pero con “quite de colaboración”. A nosotros en la provincia por material didáctico nos están pagando $30. Nosotras gastamos muchísimo más en materiales que utilizamos para los chicos”.


Una vez más, la tarea docente es cuestionada y se persigue a quienes luchan por un salario digno y mejores condiciones laborales. Esta es la realidad que se repite y que nadie hace visible. La educación no se vende, se defiende. La policía no tiene nada que hacer adentro de las Escuelas. Manifestarse es un derecho que no se puede negar.