Por Editorial Sudestada
Cuando se rasca adentro del gobierno sale mierda por todos lados, como sucedió con los audios de Karina y los Menem con la corrupción en Andis, como sucedió con el PAMI, con las transas en la Ley Bases, y como saltó ahora -pero ya era demasiado conocido- el vínculo de José Luis Espert con Fred Machado -con pedido de extradición por narcotráfico- y 200 mil dólares que recibió el candidato de La Libertad Avanza de este sujeto. Y de repente muchos se corren al costado, dejan a Espert solo, cuando esto ya se sabía, no de ahora, sino de muchos años atrás.
A su vez, en esta red mafiosa que aglutina a todo el gobierno nacional, Espert canceló el acto de campaña en Tres Arroyos por este motivo, y por el escrache que se le estaba preparando. Porque después de Lomas de Zamora, y de su rajada en moto, el “candidato” no salió más a la calle, de hecho en el cierre de campaña en Moreno estuvo sentadito en el banco, abajo del escenario, y viendo cómo Milei y Karina lo corrieron al costado.
Uno más manchado que otro, así se presentan los funcionarios de un gobierno a la deriva, mafiosos de punta a punta, con cientos de miles de dólares que viajan de un lado a otro, con sobres, con los narcos, con la Justicia alineada, con las cometas que se multiplican, y con un presidente que sobre estos casos hace silencio o tira la pelota a la vereda de enfrente.
¿Qué harán frente a este escándalo político, censurarán otra vez la información, le pedirán a otro juez manchado que le otorgue impunidad a Espert, dirán que es otro “ataque comunista”? ¿Hasta dónde es capaz de llegar todo este entramado mafioso que no deja en pie a ni uno solo de estos perversos?
Y la campaña sigue, pero al parecer sin Espert, y financiada con los préstamos buitres del FMI, con la entrada narco, las “valijas sin aduana”, y la mafia que esconde la cola y muestra la hilacha, una vez más.
